jueves, 31 de mayo de 2012

Cambios físicos.

     En general, lo bello está determinado por la cultura.  En la antigüedad, el criterio de belleza eran las mujeres con curvas prominentes.  Según los hallazgos realizados por los arqueólogos, el hombre de la edad de piedra, prefería las mujeres con un volumen de grasa importante.
     En la actualidad, basta pedir a las personas, que dibujen el ser más hermoso que imaginen, y en su gran mayoría, lo hace rubio con ojos claros.  Es más significativo, que ese personaje dibujado, es delgado.
    Hay diferencia entre el imaginario y lo concreto, pues desde mi experiencia, siempre fue más llamativo, la mujer con una personalidad que denote buen humor, inteligencia y por sobre todas las cosas, nobleza en sus gestos que lo convencionalmente bello.
    Como el ser humano es un "todo", personalidad y cuerpo van juntos, la elección de pareja está determinada por el conjunto de características físicas y psiquicas.
     Cuando Gruner  vio por vez primera a Verian, quedó obnubilado por su personalidad y apariencia.  No había día que se lo resalte, pero Verian no sentía igual.  El argumento siempre era el mismo: personalidades totalmente distintas.
      Gruner era un joven con una personalidad jocosa, vivaz rozando a lo molesto (léase hincha pelotas) y físicamente no muy llamativo para la época, pues era bastante gordo.
     Verian y Gruner no se vieron más, pues la vida fue llevándolos por distintos caminos.  Hasta que un día, mientras Gruner se encontraba trabajando en un kiosco, ingresó Verian a comprar algún producto. 
      Había pasado un año y medio de no verse y Gruner había cambiado bastante.  Su cuerpo se había estilizado demasiado, llamando la atención de Verian, quien invitó a salir al muchacho evocando la insistencia de éste en el pasado. La negativa no se hizo esperar y sus "presentes" se encontraron en contadas ocasiones. 
    Obviamente que el físico importa en la elección de pareja, pero no es determinante y a veces, puede jugar en contra...


martes, 29 de mayo de 2012

El campeón de ajedrez.

    La variedad de seres humanos es tan notoria, que encontramos sujetos totalmente apáticos, que no participan en nada, aunque los estimules. En cambio, otras personas se inscriben y participan sin tanta insistencia por parte de un otro.  Particularmente, prefiero  este tipo de personalidades, pues siempre están predispuestas a toda propuesta, "haciéndose más fácil" compartir un tiempo y espacio con ellos. (Debe ser porque me identifico con este tipo de personas, jaja)
    Gromer estaba en quinto año del colegio secundario, actualmente es el sexto del nuevo sistema y comenzaban los torneos bonaerenses, de la mano de un gobernador de dudosa reputación.   Los jóvenes se anotaban en distintos deportes y competían con sus colegios por un lugar en las finales.  
    Voley, fútbol, basquet, etc.,  toda disciplina que abría la inscripción, Gromer se anotaba. No importaba cuál,   su nombre siempre aparecía en el listado.
     En los deportes clásicos, la cantidad de alumno era superior a lo que correspondía y los profesores realizaban una preselección.  Hasta que llegó ajedrez... Nadie en toda la escuela se anotó en dicha disciplina, salvo Gromer.  Esto le permitió acceder a la instancia siguiente en el partido donde se ubicaba su escuela, conociendo muy poco sobre el juego.   Según lo expresado por su docente, en un mes sería la segunda parte del torneo.  
    Pasó el tiempo y Gromer se consagró campeón de ajedrez de su partido. Dado que tampoco se había anotado nadie en todo el partido, Gromer salió primero sin jugar un solo partido.  El concurso... el concurso se suspendió  por la poca cantidad de gente que se inscribió.  

    



lunes, 28 de mayo de 2012

Mi amiga.

     Los seres humanos, tenemos tendencia a relacionar los hechos a cuestiones místicas.  Para expresarlo de otra manera, atribuímos mayor importancia a la causalidad (la causa) que a la casualidad (lo casual).  Será que es menos ansiógeno pensar que el universo se rige por reglas donde está todo determinado, incluso lo que somos.
    Esto es más tolerado por el Hombre, pues su finitud cobra mayor importancia, pues de otra manera, no hay diferencia entre nosotros y las hormigas, salvo la razón (obviamente estoy cometiendo reduccionismo).
    Siguiendo con la opinión, considero que no hay que ser tajante y que es un equilibrio entre ambas. Como que lo casual y la adrede juegan constantemente constituyendo lo determinado y lo indeterminado.
     Mientras el director hacía la entrevista, le preguntó varias veces (más de ocho) si realmente quería trabajar en esa escuela.  Grenan trabajaba en la escuela más cara del país y cobraba tres veces más, pero no importaba. Quería conocer otro tipo de escuela.
     En el primer día conoció a Marijo, que lo "rescató" de una situación desagradable para un primer día. Luego, le mostró la escuela y le realizó las recomendaciones pertinentes.
     Desde allí, Marijo no se acercaba a conversar mucho y no se vincularon en demasía.  Con Leta llegó a entablar un vínculo más fuerte, dado que coincidían en las horas especiales y la cercanía del grupo a cargo, pues tenían primero y segundo grado.
     Pasó el tiempo y Grenan sufrió una situación indeseable que acercó a Marijo.  Desde la empatía, pudieron encontrarse y descubrirse como dos sujetos que se buscan sin pedir nada a cambio. Una amistad que perdura sin las pavadas celotípicas o reclamos sin sentido.
     Hablan el mismo lenguaje (y los dos son de hablar demasiado), escuchan, pero por sobre todas las cosas, se "elijen" siempre.
       La causalidad y la casualidad hicieron que se conozcan y se descubran, porque podés conocer muchas personas, pero es muy difícil descubrir a un Otro... 
 

domingo, 27 de mayo de 2012

Señora, su niño es el hijo demonio...

    Los niños no son malos, serán inquietos, curiosos, traviesos, pero no son seres con maldad.  Hay una etapa normal en los niños, donde realizan actos que no son del todo bien visto.  Pueden matar algún insecto, "romper" alguna planta, etc.
    Era una tarde de sábado muy aburrida para Gruner. Mientras "quemaba" unas hormigas con lupa, pensaba qué podía hacer.  Su madre y sus hermanos se habían acostado a dormir la siesta, cuando su mente se iluminó. Había recordado un capítulo de los dibujitos animados, donde el protagonista le daba pimienta a un perro y éste comenzaba a estornudar. Quería probar lo mismo.
    Sigilosamente tomó "prestado" la pimienta de su madre y la puso en un cilindro.  Con el mayor silencio posible, salió de su casa para buscar su primera "víctima" y demostrar el efecto de la pimienta. 
     Pensó en los perros de su vecino, pero estaban muy encariñado y no quería lastimarlos.  Siguió caminando y se topó con la señora de la esquina que sacaba a pasear su horrible pekinés.  Aprovechando que no veía nada la señora, sacó su frasquito con pimienta y puso una cantidad considerable en su mano.   Se acercó a la señora y saludándola se agachó hacia el perro para tirarle pimienta.
    El perro comenzó a estornudar,  primero uno, otro, otro y otro. No paraba. La señora preocupada, se acercó al perro y  observó la cara de preocupación del niño. Cuando le preguntó y repreguntó, el pequeño le contó lo que había hecho.
    Tomándolo del brazo, lo llevó a la casa de su madre, para contarle lo que hizo. Cuando su mamá recibe a la señora, se toma la cabeza y preguntó con cierta decepción qué había hecho el niño.  La señora la corrigió diciendo que no era un niño sino el hijo del demonio.
    Cabe aclarar, que el niño tenía cuatro años y hoy no puede matar ni una mosca. Aunque si está muerto, no tiene problemas en abrirlo para explorar qué tiene dentro.

sábado, 26 de mayo de 2012

¿La abuela?

     Cada familia tiene su historia, algunas son conocidas por todos los miembros, otras descansan en el más profundo silencio, hasta que... algo las lleva a la luz.
     Hace varios años, Gruner se estaba organizando para irse a vivir a Europa con su novia.  Ya había conseguido lugar para estudiar, dónde trabajar y le faltaba conseguir  la doble ciudadanía, para poder moverse con tranquilidad por el viejo continente.  El trámite le insumía 18 meses  y debía conseguir ciertos papeles de su abuelo para iniciar el trámite.  
    Al parecer, su madre no estaba muy de acuerdo con la idea de que un hijo se vaya a Europa, así que no se preocupó por ayudar en la búsqueda de información.
    Cuando comenzó a realizar el "rastreo" de información, pudo rearmar una línea de tiempo con los datos del abuelo ya fallecido.
    Al ver los datos en conjunto, se percata que una de las fechas no le cerraba, por una enfermedad de su abuelo para "los papeles". Su pariente, que nunca conoció, no era su abuelo.  El verdadero pariente, era una persona a quién él llamaba abuelo (y sentía en lo más profundo), pero que un papel decía lo contrario.
     Intentando preguntar a su progenitora sobre lo descubierto, el básico mecanismo de defensa (negación) se hizo presente y el enojo desbordó su persona. 
      Gruner intentó varias veces retomar el tema, pero siempre obtenía la misma respuesta: negación y enojo.  Hasta que un día, se pudo conversar y hacer entender a su madre, la época, el contexto y la situación imperante sobre lo acontecido.  No se la juzgó nunca, pues cada uno vive la vida a su modo y de la manera que puede, pues un manual no existe, y hay demasiados imponderables que nos hacen actuar de algún modo.  No lastimó a nadie e hizo lo que sintió, ¿uno puede ser juzgado eso?
    La causalidad y la casualidad van de la mano, determinado a las personas que van constituyendo nuestro muro llamado vida, donde cada uno es importante y deja la impronta de lo que somos hoy y lo que seremos "mañana".
     Hoy, esto es pasó a ser una anécdota más pero que destaca la importancia de saber sobre nuestras raíces, nuestra esencia para poder vivir un presente con sabiduría y sin "ruidos" que condicionen, pues la verdad libera y lo pude comprobar concretamente.

viernes, 25 de mayo de 2012

¡Pará de hablar!

     Según algunos estudios, el hombre dice 7000 palabras promedio por día.  La mujer, duplica esa cantidad denotando la diferencia entre ambos géneros.  Se puede aseverar, que la mujer conversa mucho más que los hombres, aunque a veces, encotramos excepciones a la "regla".
      Al finalizar su clase de natación, la profesora se acercó y le dijo - No es que me moleste, pero no podés hablar tanto.
       Grenan cayó en la cuenta, que lo que la profesora quería decir, es que la natación es un deporte individual y no se puede conversar tanto. Menos en medio de la pileta...
       Lo manifestado por la profesora hizo eco en Grenan y reflexionó sobre el asunto.  No solamente en natación tiene la "necesidad" de hablar, sino que traslada esto a todos los ámbitos donde participa.
        Llega a su trabajo temprano y ahí comienza la descarga verborrágica, pues al saludar habla de distintas pavadas con el primero que se cruce. Cabe destacar, que en el trabajo de Grenan, la oralidad cobra un papel fundamental, pues es docente de escuela.
        Una vez que dejó sus pertenencias en el piso superior, baja buscando alguna persona con la cual intercambiar palabras.  Cuando llega el momento en que se abre la puerta, se ubica en la misma y rápidamente, varios niños se acercan a comentar cosas.  En general, las personas a la mañana temprano llegan tan dormidos que no expresan gran cantidad de palabras. Pero lo que acontece entre Grenan y esos alumnos que se acercan, distan  mucho de esa afirmación, pues se producen conversaciones de gran cantidad de palabras.  Esto no genera fastidio en Grenan, pues la necesidad de conversar es mayor.
       Una vez que se ubica cada docente en su aula, sigue utilizando la palabra en demasía.  En los recreos acontece lo mismo, e incluso cuando salen los niños, pues siempre se acerca alguien a manifestar alguna cuestión.
        En las clases especiales, donde otro docente da la clase, se aburre tanto que tiene que irse para buscar alguna persona y hablar de alguna pavada.
        En el almuerzo, sino invitó a alguien a comer, logra descansar la lengua.  Con sus pacientes, sigue utilizando la palabra, más puntualmente con Lungo, que tiene características similiares.
      Cuando deviene la noche, donde cada uno está en su historia, ahí es cuando la "boca se cierra" a recuperar energía para el día siguiente. Aunque suple esto con diálogos "virtuales" con algunos amigos o, con el teléfono. 
      Si bien Grenan tiene buena verborragia, hay una cualidad en esta situacion y es que puede mantener una conversación, ya que muchas personas, pueden caer en el monólogo.
    Dentro de lo inconsciente habrá que averiguar qué necesita Grenan expresar...



jueves, 24 de mayo de 2012

Macumbero

     "Las brujas no existen, pero que las hay, las hay".  Esta frase, si bien asevera que no existen brujas con poderes, hay personas que se dedican a realizar actos que rozan la superstición.  Como así hay personas que realizan estos actos, hay sujetos que creen en ellos.
     Religiosamente, cada 28 de diciembre, Grenan realizaba bromas (muy pesadas) a sus amigos más cercanos. Se tomaba el trabajo de prepararlos con antelación y esperar pacientemente para observar los resultados. 
     Esa mañana le robó unas papas a su madre y tomó algunas monedas viejas de la casa de su "adorada" abuela.  También extrajo algunos granos de un maíz que había guardado en la heladera.
     Se dirigió a la casa de un amigo  fanático de ciertas cuestiones místicas.  Tarot, magia, etc. eran temas que dominaba con pasión.  Grenan, no tenía mucha idea de esas cuestiones, pero en esa época, estaba de moda "ir a ver" las macumbas, que son como "souvenirs" dejado por cierta secta para "dañar" a las personas, para utilizarlos en una broma.
    Dejó con mucho cuidado las papas con las monedas clavadas y el maíz, cerca de un árbol en la puerta de la casa. Una vez colocado los objetos tocó el timbre de la casa y obviamente, fue invitado a pasar.
   Grenan entró al hogar, ansioso esperando que su amigo descubra la "macumba".  En varias oportunidades intentó hacer que Sandren salga, pero su idea resultaba infructuosa hasta que... se escuchó un grito - Sandrennnn.
    La madre el amigo en llanto comenzó a gritar, llorar, patalear que los habían embrujado.  Sandren, también se posesionó como la madre y comenzó a gritar aún más.  En un momento, la madre casi se desmaya del susto.  
    La progenitora, utilizando el teléfono, se comunicó con una amiga que le indicó qué hacer.   Tiró algunos productos de la cocina sobre lo que encontró. Luego lo puso en una bolsa y lo prendieron fuego en un pozo que hizo Grenan. Mientras ardía, todos se agarraron las manos y la familia comenzó a decir cosas que el muchacho jamás había escuchado.
   La broma se había ido de sus manos y jamás pensó que iba a vivir lo que ocurrió. Nunca más realizó una broma en el día de los inocentes aunque no pudo descartar algunas, que obviamente, le trajeron muchos problemas.
    Nunca le dijo a su amigo que él había tirado esas cosas. - Sandres, si estás leyendo. Hola, fui yo el de la macumba.

¡Qué poca atención!

      El TDA-h es un sindrome que se caracteriza por el poco nivel atencional, la impulsividad y la hiperactividad entre otros síntomas.  En el niño, este déficit atencional es muy llamativo y se "cataloga", en general, como un niño con dificultades.
     En el adulto es más difícil observarlo, pues algunos diques de la infancia o estrategias para acomodarse en la sociedad, inhiben las conductas hiperactivas e impulsivas, aunque no siempre se logra.
     La atención sostenida de Grenan era muy baja.  Nunca se lo habían manifestado, pero no puede mantener su concentración sobre cierta acción durante mucho tiempo, pues se "aburre".  También presenta dificultad en la atención selectiva, en la que ésta, no puede discriminar todos los estímulos que acontecen alrededor.  Le presta atención hasta los pajaritos que vuelan a su lado.  Lo que encuentra en un nivel normal, es su atención dividida, ya que puede ampliar, desarrollar u opinar sobre dos sucesos en simultaneo, inhibiendo uno de sus pensamientos, para luego retomarlo cuando quiera.
    La impulsividad, es la acción de cometer actos totalmente fuera de toda convención social, sin tener en cuenta las consecuencias.  Sumado a la hiperactividad genera un especimen denominado "hinchapelotum".
   Si bien no puede "desterrarse" el TDA- h se puede abordar con ciertas estrategias y pautas puntuales:
* Explorar distintos tipos de artes, como música, escultura, escritura, etc.
* Concretizar todo lo que piensa. Si desarrolla alguna idea, vehiculizarla de alguna manera para que cobre luz.
* Desarrollar el autoconocimiento. Para anticipar conductas indeseadas como comentarios, gestos, movimientos desubicados.
* Organizar al máximo posible todas las ideas que surjan.
* Anotar todo lo que va surgiendo, sin importar que sean cuestiones insignificantes.
Continuará...


miércoles, 23 de mayo de 2012

Disparos.

     Hay imágenes que se presentan en la vida, que irrumpen de la nada, pero se quedan en la retina por mucho tiempo.  
     Todos los sábados por la mañana, Gresor pasaba casa por casa, dentro de un barrio de su localidad.  Una vez que reunía a todos, partían hacia una sociedad de fomento y abordar de manera diversa, algunas problemáticas de éstos.
      Era un barrio distinto a los que comunmente uno se encuentra en esa localidad.  En una manzana, se observaban distintos pasillos que emulaban un laberinto y se hallan casitas por doquier.  
     La primera vez que se adentró en la manzana principal, Gresor se perdió, pudiendo salir con la ayuda de uno de sus alumnos. 
     Esa mañana despejada, auguraba un día fantástico.  Inició la rutina buscando a Jhun, que servía de guía, pues recordaba la casa de cada uno de sus amiguitos y conocía a la perfección el laberíntico lugar.  
     Lentamente iniciaron el recorrido que les llevaba media hora.  Cuando estaba por finalizar el trayecto, se escucharon varios disparos.  Los niños comenzaron a gritar - Uh, tiros, vamos  a verrrr.
      Gresor desesperado, intentó frenar en vano a los niños, que de manera curiosa, querían ver las consecuencias del ruido.
     Cuando se percató que no iba a poder frenar a nadie, comenzó a correr al último de los niños.  Cuando salieron, se encontraron un caballero tirado en el piso, ensangrentado y probablemente ya muerto. Otras personas intentaba auxiliarlo pero de manera poco eficáz.  Los niños miraban sin denotar sorpresa generando mayor preocupación en Gresor, pues indudablemente esa imagen se habrá repetido en el pasado. 
    Luego de varios minutos intentando convencer a los niños que se retiren del lugar, llegó la policía haciendo que cada uno se retire. 
     Ese día se suspendió la actividad en el centro pero el recuerdo perdurará por mucho, pero mucho tiempo...




martes, 22 de mayo de 2012

Te vas de casa...

    Cuando los padres se enojan, muchas veces tienen frases o actos que se van repitiendo en todas las familias.  Entre los ejemplos, podemos mencionar:
* Esperá que se enteré tu padre.
* Te quedás sin comer.
* Bañate.
* Me sacan canas verdes (vaya uno a saber de dónde salió esta, porque es loquísima)
* Me tienen como la mucama...etc.
     Cuando empezamos a socializarnos, nos vamos dando cuenta que las frases se van repitiendo de familia en familia, como si cada una de éstas, tuviesen el mismo manual. 
      La dificultad se presenta, cuando nos encontramos con una frase que parece típica, pero en realidad no ocurre en ninguna casa...
     Era el cumpleaños de su madre y para variar, Gruner tuvo que partarse como siempre: Mal.  Desde agraviar a la gente hasta tirar cosas al suelo para romperse. 
      Su padre, totalmente enojado, lo echó de la casa.  Rápidamente tomó una mochila y saco 3 calzones y se fue corriendo de la casa.  Su primo intentó seguirlo, pero la velocidad de Gruner era tal que no pudo alcanzarlo. 
     Deambuló dando vueltas manzanas en la cuadra frente a su casa. Hasta que el miedo inundó su ser, pues era de noche y decidió volver a su casa.  Pidiendo las disculpas pertinentes, se quedó en el cumpleaños de su madre, para seguir portándose: Malllll.
    La otra vez que escuchó la frase de "destierro" fue cuando rompió un grabador y su padre, nuevamente con las últimas y modernas teorías sobre límites lo volvió a echar del hogar.  Esta vez no tomó ropa sino una bolsa que llenó con latas de arvejas y polenta (vaya uno a saber porqué tomó eso).  No había sido el único desterrado, sino también su hermano mayor y juntos partieron para dar vueltas a la manzana, pues eran muy pequeños para cruzar la calle.
    Gruner nunca más fue expulsado de su hogar, pero motivos no le faltaron a sus padres...

lunes, 21 de mayo de 2012

Primer beso.

     La mayoría de las personas aseveran que el primer beso no se olvida. Es verdad.  Esto radica en que se representan ciertas etapas de la sexualidad infantil (diferencio de genitalidad, no confundir). 
    En general, luego del periodo de latencia, donde la sexualidad queda sesgada, comienza a devenir un despertar sexual, que involucra ahora sí, la genitalidad. Si debemos poner una edad promedio del primer beso, en general es a los once o doce años hacia adelante (Lo llamativo es que ocurra antes).  Aunque a veces se adelantan las fechas.
    Ese sábado a la tarde fueron a visitar a la familia de su madrina.  Los adultos se quedaron conversando en el jardín, mientras degustaban mate con facturas y los niños se quedaron en la casa para jugar y mirar tele.
    Entre los primeros juegos que realizaron, estaba la clásica escondida. El primer turno fue para el hermano mayor de Gruner, que se dispuso a contar mientras los demás se escondían.  
    La casa no contaba con gran cantidad de espacios para esconderse, así que a veces, éstos resultaban comunes para dos personas.  Gruner siempre seguía a Karin, una de las hijas de su madrina, pues ésta le llevaba siete años y en general, el niño pequeño persigue e imita al niño más grande.  
    Cuando Karin se escondió detrás de la puerta de la pieza de los padres de la niña, Gruner se situó junto a ella como un imán.  Se miraron y comenzaron a besarse, pese a la diferencia y a lo raro de la situación.
    El juego prosiguió y los besos continuaron.   Silvim, la hermana de Karin se dio cuenta de la situación y concluyó el juego de manera brusca, para decidir de forma unilateral, que el nuevo grupo mire televisión.
    Mientras todos se encontraban mirando al aparato, Silvim comenzó a conversar sobre lo visto y el grupo juzgó la situación como prohibida.  
   Hoy Gruner, pese a que reprimió varias situaciones de la infancia, el beso aún lo recuerda y los sentimientos que se movilizaron. Lo más llamativo, es que  no sucumbió a la represión de su psique.  Gruner y Karin no se vieron nunca más.

domingo, 20 de mayo de 2012

La vida golpea bajo.

     La casualidad hizo que me tope con Lunda, una mujer que conocí hace muchos años de una manera muy particular.
     Una tarde primaveral, Gruner iba caminando por la Avenida Maipú, cuando una chica le pregunta la hora.  Éste le contestó y la mujer se quedó mirándolo.  El muchacho le preguntó qué le pasaba y ella le contestó que era la primera persona que le había contestado a su simple pregunta, pues las demás personas, huían despavoridas del aspecto que tenía Lunda.
     Gruner, que ya contaba con esa capacidad de hablar hasta con las paredes, comenzó a inquirir a la muchacha y conocer un poco más sobre la persona que se encontraba enfrente.  No tardó en venir la invitación de Luanda a compartir un "tetra", a lo cual Gruner respondió afirmativamente, aunque el brebaje no es de su agrado.
     Lunda tenía veintitantos años, pero parecía de cuarenta. Su dentadura no estaba completa, su pelo pajoso y sus ropas harapientas desprendían un olor que denotaban el poco aseo de la joven.  Su cuerpo se alejaba de la femeneidad, aunque seguramente en alguna época habrá llamado la atención de los hombres.
      La joven había perdido a su familia hace tiempo y no contaba con muchas personas que se acerquen. Su vida consistía en pasar el tiempo, ocupándolo en drogas pesadas y cuando la plata escaseaba, el alcohol era su mejor amigo (de más está decir que es irónico).  Luanda había sido violada y eso generó en Gruner, cierta empatía, pues una mujer importante en su vida, había sufrido la misma desgracia.
     A pesar de la diferencia que había entre Luanda y Gruner, siempre que se encontraban en la vía pública, conversaban sobre varios temas, aunque el muchacho intentaba convencer a la joven, a cambiar radicalmente su vida.
    Hoy, casi ni habla, sus funciones cognitivas están tan disminuidas que no puede mantener una conversación coherente.  Su motricidad tampoco es buena. Duerme en la calle esperando que al otro día, no pueda levantarse más...

El robo raro...

    Muchos de los delitos cometidos en la vía pública tienen víctimas casuales. Tiempo y espacio se conjugan en el destino inmediato de un sujeto, para sufrir un hecho por demás desagradable.
     Groin volvía a su hogar luego de visitar la Feria del Libro.  Ya era muy tarde y caminaba por las frías calles de su barrio.  De pronto, una moto en contramano subió a la vereda para acercarse a Groin. Éste, cuando divisó a la moto pensó - Me embocaron, la p... ma...
     Cuando los personajes estuvieron frente a Groin, le pidieron lo que tenía de valor, mientras mostraban un revolver de un calibre interesante (Es como los pescadores, la presa es más grande de lo que en realidad era). Groin, les manifestó que para él, lo que más valor tenía eran unos libros. Parece que mucho no les interesó a los malhechores, porqeu enseguida buscaron en los bolsillos.
      Una vez que sacaron los pocos pesos que tenía en ese momento, le pidieron la mochila que tenía en sus hombros, cuando el muchacho que conducía miró a los ojos a Groin.  Se quedó unos instantes petrificado mirando fijamente a los ojos de la persona que tenía frente.
     - Dejá, dejá, devolvele todo, nos vamos - Manifestó el conductor de la moto.
     Su compañero no entendía nada y trató de disuadir, en vano a su compañero.  Obligó a su compañero a devolver todo lo extraído y partieron a toda velocidad por donde habían venido.
    Aún hoy Groin se preguntá qué habrá pasado por la cabeza de aquel muchacho...

 

sábado, 19 de mayo de 2012

La amenaza.

     No es muy agradable para el ser humano, recibir un mensaje que manifieste que aparecerás dentro de una zanja si seguía "rompiendo las pelotas".  Si bien, el que recibe el mensaje, tendría que saber el porqué de la amenaza, no siempre ocurre esto.  Dentro de lo poco positivo que tiene  una amenaza, inferencialmente se desprende que algo que uno hace, genera celos sobre un Otro.
   Dentro de las amenazas encontramos muchas  "abiertas" o "cara a cara", dejando bien en clara la postura del Otro.  También encontramos las que son vía telefónica, son más difíciles de entender a qué hacen referencias, porque el interlocutor, no es muy específico en la misma.    Aunque la gran mayoría tiene un punto en común, una pollera.
     Grant recibió varias amenazas, de distinto tipo a lo largo de su vida.  Las consideradas abiertas, obviamente generaron medidas sobre el cuidado de la persona, pues al manifestar el motivo y exponerse frente a un Otro, la probabilidad de concretar la misma es mucho mayor que un mero llamado telefónico.
     El teléfono puede llegar a tener un efecto contrario, pues al no haber un rostro, las palabras que utiliza un Otro llegan a ser más graciosas que intimidantes.
    Una noche, sonó el teléfono y se escuchó una voz "modificada" del otro lado del teléfono. Ésta aserveraba que lo iba a matar si seguía haciéndose el gil. El último término resultaba ser muy gracioso para Gran, pues cada vez que lo escuchaba, se tentaba y le costaba parar (cabe destacar que Grant se ríe de cualquier cosa).
    La voz del otro lado del teléfono volvía a repetir el mensaje, pues infería que no había quedado claro.  Grant, trantando de no mofarse más de la voz del otro lado, empezó a preguntar el porqué, pues no entendía. 
     Luego de una pequeña charla, donde primaban preguntas de Grant hacia su interlocutor, pudo lograr que cambie la actitud del caballero.  El muchacho estaba dolido porque su ex novia lo había dejado  y buscaba un culpable fuera de su persona. 
     Esta fue la única vez que Grant pudo conversar en buenos términos con una voz amenazante por teléfono, pues en general, manfiestan el acto de descarga y cortan.  Perro que ladra no muerde dice el dicho, pero por las dudas, que al can le pongan un bozal.

viernes, 18 de mayo de 2012

Qué vicio...

 El vicio a un Objeto es una de las situaciones que puede ser evitable y que una vez adentrados, es muy dificil salir.  Hay infinidad de vicios y todos ellos tienen una connotación negativa, aunque el que lo sufre, se autoengaña para justificar su accionar. 
    Considero como Objeto no sólo a las cosas, como cigarrillo, alcohol, etc. sino también a las personas. Por eso, cuando utilice el término Objeto, lo haré en mayúsculas.
     El tabaco fue para Grosin un elemento presente en gran parte de su vida.  Ya desde pequeño, incursionó en el mismo, pues a la edad de seis años, le robó un paquete de cigarrillos a su papá para fumarlos en el baño.
     Obviamente, su madre sintió el aroma y usando su brazo superpoderoso (aunque siempre fue muy poco efectivo), hizo reflexionar a Grosin sobre la práctica realizada en el baño. 
     A los doce años, en los arbores de la adolescencia, se juntaba con sus amigos deportistas y fumaban cigarrillos antes de entrenar.  La práctica duró poco tiempo y el vicio no llegó a concretarse. 
   Estos dos hechos tenían como característica, la curiosidad. Sin embargo, el segundo empezaba a marcar otra característica que se repetiría más adelante: la inseguridad.  Para ser "más importante" en el grupo, había que fumar.  Obviamente, el vínculo incosciente era un vil autoengaño.
   Cuatro años después, frente al ofrecimiento de un compañero y la inseguridad propia del adolescente, comenzó a fumar.  Durante los primeros años, los rituales para tapar el olor comenzaron a aparecer. Desde desodorantes y perfumes hasta manipular hojas de pino o plantas que tengan un olor intenso. Obviamente, ninguno servía, porque lo primero que se pierde es el olfato y el fumador, no puede sentir su olor a cigarrillo, que es muy acentuado.
    Luego, aparecía el autoengaño, "como que se puede abandonar cuando se quiera, no me hace nada", etc.
    Muchos años después, Grosin realizó un insight de su vicio, y recién ahí intentó abandonarlo. Luego de mucho esfuerzo, pudo dejarlo. Por suerte, antes de que su organismo se destruya completamente...
  
    

jueves, 17 de mayo de 2012

El nieto del demonio.

    Los abuelos son como los padres, pero te dejan hacer lo que quieras y te perdonan todo. ¿Todo?
    Gunter era un niño muy travieso. Demasiado travieso para "La Oma", su abuela materna de origen alemán.  En sintonía con este tipo de población, su personalidad era muy estructurada y el vínculo con Gunter era muy complejo, dada la diferencia de personalidad.  Uno era demasiado "inquieto" y la otra demasiado cerrada.
    El vínculo nació trunco, pues Gunter debería haber sido mujer, ya que en la familia había un varón.  Eso trajo un enojo que duró algunos meses con la madre de Gunter.
    Pasó el tiempo y el fanatismo por el fuego llevaron a quemar varias preseas de su querida abuela.  También presentó dificultades cuando devino su etapa "bichera", dónde su abuela pudo encontrarse seres de lo más variado en lugares totalmente insospechados, como heladera o cocina.
   El "amor" se hizo mayúsculo, cuando Gunter se encontraba jugando en el jardín con un frisbee y su abuela se cortaba florcitas para decorar su hogar.  En un momento, intentando integrar en su juego a la "Oma", la llamó y le lanzó el aparato volador.  La abuela se dio vuelta y el frisbee le pegó entre medio de los dos ojos, tirándola al piso y dejándola desmayada.
    Tuvo que pasar un mes para que Gunter vuelva a la casa de su abuela y mucho más tiempo,  para que la "Oma" cambie su mirada fulminante sobre su adorable nietito.



miércoles, 16 de mayo de 2012

Tantas vidas como un gato.

    Según algunos mitos populares, los gatos constan de siete vidas.  Algunos sujetos sienten que son como los gatos, pues pasaron situaciones donde su vida corría un peligro inminente y aún no se explican cómo salieron airosos de ésta.
   Grosians se jacta que ya a (mal)gastado cinco de sus siete vidas.  Esto lo ha llevado a transitar por "la vida" con muchísimo más cuidado, porque pese a que es un mito y no cree mucho en este tipo de cuestiones, conoce el dicho que las "brujas no existen, pero que las hay, las hay".
   Primera vida:  Alrededor de los tres años, Grosians iba con su triciclo investigando por su barrio. De pronto, divisó una fosa y decidió investigar.  Al acercarse a  la misma, cayó dos metros y medio cabeza abajo, golpeándose con las rocas que se encontraban en el fondo.
       A la media hora, era llevado a la casa de su madre, gracias a una señora que escuchó el llanto del niño pidiendo ayuda, pues una horda de ¿¿¿¿cocodrilos?????, amenazaban su frágil cuerpo. Aún se pregunta esa señora cómo no se rompió el cuello dada la altura y las características de la fosa.
   Segunda vida:  El trabajo es salud. Así dicen, pero cuando Grosians partió para entregar un curriculum, fue embestido por un colectivo diferencial, que lo tumbó al suelo y le pasó la rueda por encima de su pierna. El colectivo siguió avanzando y las ruedas se dirigían a su pecho, pero un amigo tironeó para que ésto no ocurra.  Milagrosamente, sólo se hinchó un poco su tobillo.
   Tercera vida:  Un mal electrocardiograma, junto con un mal análisis generaron un pensamiento sobre la finitud de su vida. Al tiempo de averiguar para inciar un tratamiento, no había vestigio de los que le había ocurrido. Luego de varios diagnóstico, se corroboró la inexistencia del mismo.
   Cuarta vida:  Un ataque brutal por parte de una patota, desencadenada por un acto de idiotez humana. (Ya contado)
   Quinta vida. Grosians vivía en una morada donde el horno de la misma, tenía sus mañas para ser encendido. Hacía un año que residía allí y estaba muy familiarizado con el mismo.  Al encenderlo, dejaba "enganchada" la manija, para "engañar" a la válvula de seguridad con la que cuenta cada horno.
      Ese día se había levantado temprano y había llegado a su casa cansado pero con hambre. "Engañó" al horno, pusó la comida en el mismo y se acostó en la cama a mirar televisión mientras se cocinaba su cena.
     El horno se apagó, pero siguió saliendo gas del mismo, pues la válvula de seguridad había sigo "engañada".  Lentamente comenzó a dispersarse por toda la casa y llegó a la habitación de Grosians.

   El "cocinero" no tardó en quedarse dormido, por efecto del cansancio y probablemente del gas.  Hacía poco que había llegado a la casa, tenía todo cerrado, así que el gas no podía evacuarse.  Todo seguía encaminado hacia un final no muy agradable, hasta que sonó el celular y despertó a Grosians.
   No se escuchó ninguna voz del otro lado del teléfono. Era un llamado que se repitió algunas veces, vaya uno a saber, si para embromar, por error o por otro motivo. 
  Cuando se percató de lo acontecido, tomó conciencia que ese llamado lo salvó del fatídico final que se avecinaba.  No pudo agradecer el ¿salvataje? casual, pero algún día el destino dará la oportunidad de hacerlo o será que Grosians tiene el telefono de Dios...

martes, 15 de mayo de 2012

Gente rara.

     Cuando se es niño, el espectro de personas que conoce es muy acotado, comparado con la cantidad de personas que conocerá a lo largo de su vida. 
     A medida que crece, uno va conociendo más y más personas.  La diversidad de personalidades hace que la experiencia sea muy enriquecedora, como a la vez sorprendente.
     Entre los personajes más raros, encontramos a una NN (nunca supe el nombre y tampoco lo quiero saber) que conocí en el colectivo. Si ese vehículo maravilloso transforma a la gente o aglutina a los personajes. 
     El colectivo venía lleno, salvo por un asiento que se encontraba libre, junto a una señorita cuya vestimenta era llamativa. A Gunter le llamó la atención y se sentó junto a ella, y ésta comenzó a mirarlo con cara de pocos amigos. 
     Por ser demasiado jocoso, comenzó a mirarla y tentado por la situación, comenzó a sonreir.  Lejos de imitar la sonrisa, comenzó a gesticular cara de fastidio.
    Obviamente, la cara era demasiado graciosa para Gruner y la sonrisa dejó paso a la carcajada. Esta carcajada, llamó la atención de los demás pasajeros y generó el enfado de la joven.  Ésta, comenzó a esgrimir frases en un idioma totalmente desconocido, pero que sonaban a una maldición.  Con el tono de voz diabólico, comenzó a hablar más y más fuerte. 
     La risa fue aumentando en intensidad, dado que Gunter pensaba que era una broma. Miraba para todos lados buscando algo que denote que era una cámara oculta. 
    Luego de vociferar palabras inexistentes, comenzó a hablar en un castellano sin conectores, pero manteniendo la voz diabólica.    Repetía palabras tales como demonio, malvado, etc.
    Unas paradas después que se sentó Gunter, la joven se levantó rápidamente y se bajó del colectivo para perderse por las inmediaciones de la gran ciudad...

domingo, 13 de mayo de 2012

El destino te somete a sus caprichos.

      Cuando realmente querés que algo salga, no sale, pero cuando menos lo esperás, sucede.
      Cada vez que visitaba a su madre en día lluvioso, su hijo se llevaba su paraguas, que recién era devuelto a los pocos días.  Cansada de esta situación, decidió regalarle un paraguas de tamaño mayúsculo y color más llamativo.
      El regalo fue aceptado gustosamente y esperaba ansioso por estrenarlo.  Pasó el primer mes y no pudo utilizar el regalo, pues a pesar de que llovió, siempre se encontraba protegido por algún techo.  Si llovía toda la mañana, paraba de llover cuando salía a la calle. Si quería comprar algo, automáticamente cesaba la lluvia.
     Así pasó el segundo y tercer mes.  A mitad del cuarto, viajando en colectivo hacia Tigre, le pidió a una señora que le indique cuándo lleguen a la Biblioteca del mismo partido.    El viaje transcurrió y se quedó conversando de algunas pavadas con la señora, cuando ésta se percató que el muchacho debía bajarse: - Gruner, bajate yaaaa. Ahí esta la biblioteca.
     Gruner se levantó rápidamente, tocó el timbre y el colectivo frenó para permitir que el pasajero baje.  Cuando se percató que el paraguas había quedado en el colectivo, caminó 4 pasos y lentamente comenzó a llover...