El NO, un palabra simple e importante a la vez. La primera palabra que internaliza un sujeto, pudiendo ser aplicada, en futuras acciones. Por ejemplo, cuando no desea cierto alimento.
Si bien es la primer palabra que el sujeto le da significación no es una palabra que pueda ser dicha facilmente. Es tan difícil decir no, que muchas veces, el ser humano realiza acciones indeseadas. Un ejemplo claro, es cuando a un alumno le dan para lavar una taza y lo hace pese a que interiormente no desea hacerlo (en su casa ni siquiera levantan un vaso). Otros lo desan hacer, producto de la idea de "aprobación" por parte del docente.
Cuando el NO se hace presente, se genera una situación de poder donde el más "poderoso" debe ser lo suficientemente inteligente para entender, comprender y ayudar al otro.
No todos los docentes tienen claro esto y los que lo tienen claro, no siempre pueden aplicarlo, pues...son seres humanos.
El día anterior había ocurrido algo (realmente no recuerdo qué) y se los invitó (???) a que al día siguiente, en el primer recreo conversen sobre lo sucedido. Todos se presentaron menos un niño, que se quedó jugando a la bolita, pues consideraba que no era responsable de lo sucedido. Obviamente, interiormente era más importante el juego, porque pensaba que perdería los puntos del campeonato.
Cuando se le llamó la atención y se le pidió que vaya con el resto de sus compañeros, el no fue rotundo. Esa negativa no fue asimiliada por el docente, que comenzó a amenazarlo. El alumno, al seguir empecinado en su postura, generaba el enojo del docente que no se encontraba habituado a recibir negativas. El castigo fue en aumento, hasta que se llegó a la firma del libro de disciplinas.
Pese a que hubo una falta, el gran error estuvo en el docente que no pudo intuir que el No estaba dirigido hacia la situación injusta y no hacia la persona. El castigo no cumplía la función que le correspondía y tampoco hubo una situación de reparación, por ende, en esta situación no sirvió. Fue uno de los errores que permitieron comprender, entender y ayudar a algunos alumnos, en situaciones parecidas, donde la agresividad estaba mal focalizada.
Si bien es la primer palabra que el sujeto le da significación no es una palabra que pueda ser dicha facilmente. Es tan difícil decir no, que muchas veces, el ser humano realiza acciones indeseadas. Un ejemplo claro, es cuando a un alumno le dan para lavar una taza y lo hace pese a que interiormente no desea hacerlo (en su casa ni siquiera levantan un vaso). Otros lo desan hacer, producto de la idea de "aprobación" por parte del docente.
Cuando el NO se hace presente, se genera una situación de poder donde el más "poderoso" debe ser lo suficientemente inteligente para entender, comprender y ayudar al otro.
El día anterior había ocurrido algo (realmente no recuerdo qué) y se los invitó (???) a que al día siguiente, en el primer recreo conversen sobre lo sucedido. Todos se presentaron menos un niño, que se quedó jugando a la bolita, pues consideraba que no era responsable de lo sucedido. Obviamente, interiormente era más importante el juego, porque pensaba que perdería los puntos del campeonato.
Cuando se le llamó la atención y se le pidió que vaya con el resto de sus compañeros, el no fue rotundo. Esa negativa no fue asimiliada por el docente, que comenzó a amenazarlo. El alumno, al seguir empecinado en su postura, generaba el enojo del docente que no se encontraba habituado a recibir negativas. El castigo fue en aumento, hasta que se llegó a la firma del libro de disciplinas.
Pese a que hubo una falta, el gran error estuvo en el docente que no pudo intuir que el No estaba dirigido hacia la situación injusta y no hacia la persona. El castigo no cumplía la función que le correspondía y tampoco hubo una situación de reparación, por ende, en esta situación no sirvió. Fue uno de los errores que permitieron comprender, entender y ayudar a algunos alumnos, en situaciones parecidas, donde la agresividad estaba mal focalizada.
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