Primera práctica de reiki con otra persona.

     Lua conoce a Grumen hace algunos años, siendo esto significativo, pues no todo el mundo se presta a acostarse en la cama de un Otro, y que éste utilice sus manos "para trasmitir energía". Desde la sola mención, ya se presta a pensamientos fuera de lugar.

    Apenas Lua se acostó, comenzó a reírse a tener un "ataque" de risa, suceso normal cuando se encuentran ambos.  

    Una vez que bajó el nivel de ansiedad, comenzó la práctica. Lua tiene ciertas creencias acordes a lo que es la práctica del reiki.  Grumen, aún es reacio.

    Según lo que sintió Grumen, el calor se sintió intenso en la zona de los ojos, plexo solar y corazón.  Una vez finalizada la "sesión", Grumen pensó que no había pasado nada, pero Lua describió sus sensaciones.

    Lua manifestó:-  Sentí un  calor intenso en los ojos y un "incendio" en la zona de acá (señala el plexo solar). Era como que me agarrabás de acá (la misma zona demarcada) y me tirabas y me quemabas.  También en los pies.  También sentí como una mezcla de felicidad y tristeza. Pero no tan triste, como que se fue y después felicidad.  

     Desde el exterior, se la observó hiper relajada. Comenzó a lagrimear y bostezar. Las lágrimas no eran de tristeza, sino que brotaban solas. 

    Al otro día, Lua argumentó que se sentía re bien y que le encantaría volver a realizar reiki.

Conclusión: 

   Aún soy reacio, pero algo debe haber. Si es la sugestión (dado que Lua es creyente de este tipo de cosas) o no, no importa, basta que a alguien le haga bien para que sea válido. ¿No?

Proximamente habrá más "conejillos de indias".